Aparthotel El Faro

La habitación era preciosa, con buena cama y todo genial. La terraza de lujo, con buenas vistas al mar. Cuando vuelva a ir allí, me volveré a quedar en éste hotel y también se le pienso recomendar a quién quiera ir allí de vacaciones. UNA MARAVILLA DE HOTEL Y DE ZONA.

El apartahotel esta muy bien, en una zona tranquila y a tan sólo 4 km del centro. La habitación muy limpia, el personal agradable. Sin dudarlo volvería a ir. La verdad que para la época que hemos ido hemos estado muy contentos y encantados. VOLVEREMOS

El apartamento está muy bien, está a pie de playa, tiene piscina, pero podría tener una mejor limpieza, la primera noche que estamos y me encuentro una cucaracha grande en la cocina y tres minis cucarachas en la bañera, podría estar mejor cuidada la habitación en cuanto a limpieza.

Falta de mantenimiento por todos los lados. Pintura, muebles de los apartamentos, paredes etc La zona de la ducha y piscina deja mucho que desear en la limpieza. Baldosas con moho. Las vistas son buenas pero es una pena que el único apartahotel que hay en Cullera lo tengan con falta de mantenimiento y limpieza. Se le podría sacar mucho más partido y renovarlo .

Ottimo aparthotel che grazie alla posizione ha una vista favolosa. Appartamento ben arredato con cucina attrezzata. Con una passeggiata di 10 minuti si raggiungono 3 spiagge con mare pulito in alternativa bella piscina.

La cama regular ,apartamento grande pero no limpia nadie en dos noches ni te cambian toallas tampoco te informa nadie que no te hacen limpieza en la habitación así que .....muy regular ,el sillón es matador se te clava todo no dejan ni una simple botella de agua de bienvenida

Como positivo las vistas al mar y la limpieza del complejo, en general está bien. La cama era muy cómoda. Estuve 15 días y limpiaron 3 veces y tuve que pedir que limpiarán el vidrio de la barandilla de la terraza porque no lo habían hecho y me impedía ver el mar con claridad. Las toallas cada 2 o 3 días y sábanas cada 4. No aconsejo este apartahotel si vais con niños muy pequeños o personas con movilidad reducida, ya que para ir a pie a la playa hay que bajar, y lo que es peor subir, 108 escalones, 81 hasta la carretera y 27 más para bajar a la playa del Dosel. Si vuestras piernas no son muy largas el tiempo hasta llegar a la playa son unos 15 minutos. El estudio no es confortable, no he tenido ni sofá, ni un asiento cómodo para relajarme en terraza. También comentar que estaba en el apartamento 101, osea el primero y todos los días a la hora de la comida venían avispas que nos arruinaban la comida.....eran carnívoras y mucho. Sabemos que septiembre es el mes de las moscas y doy fe, en este apartamento siempre había tres o cuatro y hay que ver lo molestas que son. Utensilios para cocinar poquísimos y malísimos, tuve que pedir un cuchillo para pelar patatas, no había nada y lo pedí y me trajeron 3 más de mesa, diciéndome que no podía ofrecerme otra cosa.... Se lo comenté a la chica de la limpieza y gracias que me dio uno pequeño. Creo, sinceramente, que deberían invertir un poco para hacer que la estancia sea más cómoda y agradable. Creo que la relación calidad -precio de este establecimiento no es buena.